SACALECHE

MASTITIS: el gran miedo de la lactancia.

Lo primero que hay que decir para este artículo es: SIEMPRE DEBEMOS RECURRIR AL PERSONAL DE SALUD COMO REFERENCIA. Dicho esto, ahora resta decir que ante cualquier duda debemos recurrir al personal de salud, si si, OTRA VEZ. Es muy importante, no solo porque tendrán muchísimos más recursos para ayudarte, sino porque cada mujer es un mundo y cada inconveniente que puede presentarse distinto y es imprescindible que alguien CALIFICADO pueda evaluarte, teniendo en cuenta específicamente tu caso y no una generalidad. Este artículo sirve como información a tener en cuanta en modo amplio, pero no necesariamente se adecue a todas. La mastitis en la lactancia es un tema serio, por lo cual quería dar esta introducción al tema. 

¿Qué es una mastitis? ¿De que hablamos cuando mencionamos una mastitis en la lactancia?

Cuando hablamos de mastitis, nos referimos a una inflamación en el tejido mamario que generalmente es causada por una infección. Esta condición suele ocurrir con mayor frecuencia durante las primeras semanas de lactancia, y las madres primerizas tienen más probabilidades de experimentarla debido a diversas razones que a veces desconocemos o no manejamos adecuadamente. Sin embargo, es importante destacar que podemos tomar medidas para evitarla, ya que afecta a un porcentaje considerable de mujeres, entre el 3% y el 35%.

Es fundamental conocer las precauciones necesarias para evitar la mastitis, ya que puede ser una experiencia incómoda. Personalmente, tuve la suerte de evitarla gracias a las precauciones que tomé, a pesar de haber experimentado una mastitis antes de mi embarazo (¡sí, también puede ocurrir incluso si no estás amamantando!). Durante el inicio de la lactancia, estuve al borde de una mastitis severa, pero con paciencia y cuidados adecuados, logré superarla.

La mastitis puede ser causada por la obstrucción de los conductos lácteos debido a la acumulación de leche materna o por la presencia de bacterias que ingresan al cuerpo y causan una infección (especialmente cuando hay grietas en los pezones).

Es importante estar alerta y acudir de inmediato a un centro de salud si presentamos los siguientes síntomas de mastitis:

🔵 Enrojecimiento de los senos
🔵 Sensación de aumento de tamaño y calor en los senos
🔵 Fiebre
🔵 Dolor en los senos

¿Cómo podemos prevenir una mastitis?

¡Con mucho cuidado y algo de suerte! Si notamos los primeros signos de que una mastitis podría estar tocando a la puerta, como hinchazón, dolor, enrojecimiento o una zona más caliente, podemos tomar las siguientes medidas:

🟡 Aplicar calor a la zona utilizando bolsas de semillas calientes en el microondas.

🟡 Masajear la zona desde afuera hacia el pezón y realizar movimientos circulares sobre las zonas más duras.

🟡 Aplicar frío a la zona entre las tomas.

🟡 Aumentar la frecuencia de las tomas e intentar vaciar completamente las mamas. Si esto no es suficiente y aún hay una gran cantidad de leche,

🟡 Intentar extraer leche manualmente (la ducha es una excelente opción).

Recuerda que es importante buscar asesoramiento médico si los síntomas persisten o empeoran.

¿Cómo el sacaleches puede mejorar o empeorar una mastitis?

Si, y solo si aumentar las tomas del bebé y extraerte leche manualmente vos misma no alcanza, podrías recurrir a un sacaleches. En este caso, procura que sea manual, ya que un sacaleches eléctrico podría sobre estimular la producción de leche materna y ser completamente CONTRAPODUCENTE. True story, me pasó, fue mi primer gran metida de pata durante el inicio de la lactancia.

Entonces a la hora de revertir una posible mastitis que se asoma, el sacaleche no es tan buena idea. Eso sí, con la lactancia ya establecida, terminar de vaciar los pechos con un sacaleche podría serte de gran ayuda.

Consejitos útiles en pocas palabras

Mejoras para prevenir la mastitis en pocas palabras:

💜Colocar al bebé en diferentes posiciones para asegurar que se vacíe completamente el pecho.

💜Aplicar calor y masajear los pechos antes de las tomas para facilitar el flujo de la leche.

💜Vaciar completamente un pecho antes de pasar al otro.

💜Asegurarse de que el bebé se enganche correctamente al pecho y aumentar la frecuencia de las tomas si es posible.

💜Evitar situaciones de estrés.

💜Utilizar cremas con lanolina para prevenir grietas en los pezones.

ATENCIÓN: Todo lo expuesto en esta WEB son las conclusiones de una mamá en práctica. No soy medica, ni matrona, ni me dedico a la salud. Si bien toda la información que tengo la fui cotejando con matronas y pediatras, ya que quiero garantizarle a mi bebé el mejor bienestar, no me convierte en palabra autorizada. Creo que debe ser tomado como una opinión y ante dudas consultarlas con el personal de salud de tu confianza.